El Gobierno de Austria anunció este miércoles que levantará una valla en la parte fronteriza con Eslovenia para gestionar el flujo de miles de refugiados que llegan al país con intención de pedir asilo en Europa Occidental.
La ministra del Interior, Johanna Mikl-Leitner, informó que el martes inició la construcción de una “barrera técnica” pero a su juicio esta valla no se levantará con el fin de cerrar la frontera, sino para controlar el tránsito de los refugiados.
“Se trata de permitir un acceso (al país) ordenado y controlado, no de cerrar nuestras fronteras”, aseguró Mikl-Leitner en una entrevista con la radio pública austríaca.
Cada día entran en Austria entre tres mil y ocho mil refugiados, sin bien podrían llegar a rondar los 12 mil, estimó la ministra.
Entretanto, Eslovenia precisó que unos 14 mil 500 refugiados están actualmente en el país, esperando alcanzar la frontera con Austria y otros llegan procedentes de Croacia.
Ante la llegada masiva de solicitantes de asilo a Eslovenia, Bulgaria, Rumanía y Serbia anunciaron hace semanas que cerrarán sus fronteras si Alemania y Austria acogen esta medida.
En los últimos meses, Europa ha experimentado la peor crisis de refugiados desde la Segunda Guerra Mundial. En lo que va de 2015 más de 681 mil personas llegaron a ese continente luego de cruzar el Mediterráneo. Al menos 3 mil 175 han perdido la vida durante la peligrosa travesía.
El pasado 26 de octubre, líderes de la Unión Europea (UE) acordaron enviar a cientos de guardias fronterizos a Eslovenia durante la minicumbre que realizaron un día antes sobre la crisis de refugiados, informó el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker.
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