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Francisco “Kiko” Bautista, recién electo como diputado suplente por la autodenominada Mesa de la Unidad Democrática (MUD) en Mérida, develó las intenciones que tienen de atentar contra la Ley de Responsabilidad Social en Radio y Televisión (Ley Resorte).
De esta manera, su plan antidemocrático apunta a eliminar la Ley Resorte, desconociendo los logros que la normativa alcanzó en la materia de lenguaje y contenidos, pues entre la oposición existe solo un interés capitalista.
"Hay que desmantelada, destruida, pisotearla y no lo digo ofensivamente”, sostuvo sin tapujos, en declaraciones al portal “El Pitazo".
Lo que intenta el vocero de la ultraderecha es vender el supuesto de que la normativa censura la libertad de expresión, cuando realmente la Ley Resorte nació en pro del respeto por la audiencia, de la protección a los niños, niñas y adolescentes, así como la promoción de la cultura tradicional venezolana.
Intenciones implícitas
El 7 diciembre de 2004 fue creada la Ley de Responsabilidad Social en Radio y Televisión, y reformada en 2011 para incluir a los medios digitales. Su génesis no solo permitió frenar el recurrente abuso de los dueños de medios ante el derecho a la libertad de expresión.
Desde entonces, se impulsó la responsabilidad de los prestadores de servicio, con democratización del espectro radioeléctrico, la promoción de la justicia social, la producción nacional independiente, el apoyo a los medios comunitarios, la pluralidad del mensaje y la contribución a la moral y buenas costumbres.
No obstante, este escenario democratizador parece ser invisible ante los ojos de la ultraderecha, sobre todo cuando el diputado opositor “Kiko” Bautista expresó: “Esa ley condiciona a los medios del Estado. Los obliga a callarse, a censurarse, los obliga a no ejercer lo que está establecido en la Constitución que es informar”.
Ante estas palabras, se lee entre líneas un nuevo plan de persecución, amenazas y amedrentamiento contra el Sistema de Medios Públicos, propuesta que se suma a los ataques emitidos por el diputado Henry Ramos Allup, quien desprestigió el canal de la Asamblea Nacional.
Finalmente, la cobardía de los políticos opositores buscará la restitución de la señal de Radio Caracas Televisión (RCTV), un canal al que no se le renovó la concesión, un medio que manipulaba con odio y zozobra al pueblo venezolano.
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