Conocidos los resultados de las pasadas elecciones parlamentarias, de este 6 de Diciembre, quedan al desnudo varias “noticias”, que sirvieron de apoyo internacional, a la contra revolución de la derecha venezolana.
Recordemos que más de 100 diarios de nuestro continente y de Europa, se cartel izaron en una arrogante, agresiva y monstruosa, campaña de desinformación, que vendió al mundo la falsa idea, que Venezuela era gobernada por una feroz dictadura y que el Poder Electoral, era un apéndice de dicha dictadura, encarnada ahora por nuestro presidente constitucional Nicolás Maduro.
Revisando los resultados, podemos llegar a algunas conclusiones; por ejemplo, que la derecha tuvo un crecimiento de apenas 5.13% y las fuerzas revolucionarios perdimos aproximadamente 2 millones de votos. Lo que echa por tierra la temeraria afirmación, que el pueblo chavista nos traiciono; lo correcto y lo cierto fue, que nos castigó y es lo que nos corresponde descifrar.
Solo a manera de ejercicio, me atrevería a señalar algunos aspectos, que incluso han sido señalados por otros camaradas; la respuesta del gobierno nacional, ante la guerra económica, fue tardía y a veces hasta contradictoria. Incluso nos correspondió en varias oportunidades alertar sobre la operación morrocoy en las estaciones de servicio y muy poco se realizó para corregir, dicha aberración.
En Portuguesa, tuvimos una ventaja a nuestro favor; el Comandante Wilmar Castro, en su primera campaña electoral se comprometió a transformar, ya que no venía a gobernar y destacaba lo escrito en su programa de acción, donde afirmaba, que si éramos capaces de ir a las casas a recoger la basura, porque no podíamos implementar un mecanismo para llevarle comida a los portugueseños a sus casas; solo Chávez nos había alertado sobre la guerra económica.
A pesar de los primeros meses de gobierno, perdidos por una gerencia ineficaz, con el nombramiento del Coronel Alfredo Mora, se comenzó un ambicioso plan, donde se establecieron alianzas con el sector privado y con el movimiento popular organizado y a pesar de los tropiezos, se llegó con alimentos de calidad no subsidiados, a los rincones más apartados de nuestra geografía regional.
Hoy tenemos un cumulo de experiencias y una administración sustentable, que nos ha permitido incluso auxiliar a otros estados y en especial en la atención de los damnificados del estado Apure y a nuestras familias del estado, afectados por las lluvias.
Necesitamos adelantar un debate político, de cara a nuestro pueblo, tal y como lo propone nuestro Presidente Constitucional Nicolás Maduro.
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