TRINCHERA DE IDEAS 31 / 01 / 15

ALBERTO MENDOZA 
MAESTRO AMBULANTE 

Abrimos nuestro primer artículo del año de la Columna “Trinchera de ideas” con dos acontecimientos noticiosos, el golpe continuado y el ataque del imperio estadounidense contra el Camarada Diosdado Cabello, lo que nos permite deducir que el 2015 será un año tormentoso tanto económica como políticamente.
El Presidente Obama reconoce el fracaso de la política del bloqueo a Cuba y cambia de estrategia, neutraliza a Cuba desbloqueándolo , bombardeándolo con electrodomésticos, como decía Galbraith, y arrecia la campaña contra Venezuela, mal ejemplo para América y del mundo, (Grecia dixit), el encuentro de los tres expresidentes de Chile, México y Colombia así lo certifica.

La presentación de la Memoria y Cuenta y el anuncio de las acciones a seguir en el 2015 del Presidente-Trabajador Nicolás Maduro, sorprendieron a unos cuantos. La oposición esperaba medidas neoliberales en correspondencia con la baja de los precios del petróleo y las orientaciones del FMI, porque no conciben una salida distinta. Los otros sorprendidos fueron los que esperaban salidas mágicas y el Decreto de salud y felicidad eterna para el pueblo venezolano, como si con los buenos deseos.
Muy al contrario, con la humildad que celebraría nuestro Comandante Supremo Hugo Chávez afirmo que el problema es de todos, cada sector social debe asumir su responsabilidad y hacer los aportes necesarios para mantener la gobernabilidad, colocando dos premisas claves, hay que olvidarse del petróleo a 100 dólares y el llamado al diálogo nacional para buscar la solución a la situación.
El debate nacional debe partir del reconocimiento del agotamiento del modelo rentista petrolero y de su expresión política que es la democracia representativa, pero también hay que incorporar a la discusión de si están las condiciones objetivas y subjetivas para el socialismo en Venezuela, Por lo tanto, el debate es entre los transformadores, entre los agentes del cambio social y no entre los que añoran el pasado,
Pero también debemos reconocer que el Gobierno y la Revolución son dos instancias diferentes y que algunos errores del gobierno nos alejan del camino revolucionario y la tarea es que  la vanguardia promueva y ejecute acciones contundentes que radicalicen la Revolución y consoliden el Gobierno,

Comentarios

  1. Gracias Alberto por tu regreso a los comentarios y opiniones. Considero oportuno el analizar el Rol del Gobierno y el de los Revolucionarios ya que desde el Gobierno Revolucionario los revolucionarios hacen la revolución de los hechos sociales, económicos, políticos e influyen en la generación de la cultura, pero sus errores pueden poner en riesgo la labor revolucionaria, por ejemplo hay que asistir al que padece enfermedades, hambre y miseria, pero si esto se hace desde el gobierno sin la promoción y desarrollo de la cultura del trabajo, la solidaridad y el buen uso de los recursos, podemos convertir a los ciudadanos en vividores del estado, que al igual que la sanguijuela se pega del Estado para vivir de él,
    Los revolucionarios lo somos en el gobierno, en el partido, en las organizaciones sociales y en la sociedad toda.
    Es bueno tener claridad de que en el Gobierno y en la sociedad no todos sus integrantes son revolucionarios, en el partido de la Revolución todos deben ser revolucionarios y es importante que en las organizaciones sociales sus propuestas, programas y acciones deben ser revolucionarias.
    Estamos frente al problema de todas las revoluciones que impulsan el socialismo en el transito hacia la sociedad perfecta LA SOCIEDAD COMUNISTA.
    Luis Hernández Oliveros
    Maestro Comunero

    ResponderEliminar
  2. Gracias Alberto por tu regreso a los comentarios y opiniones. Considero oportuno el analizar el Rol del Gobierno y el de los Revolucionarios ya que desde el Gobierno Revolucionario los revolucionarios hacen la revolución de los hechos sociales, económicos, políticos e influyen en la generación de la cultura, pero sus errores pueden poner en riesgo la labor revolucionaria, por ejemplo hay que asistir al que padece enfermedades, hambre y miseria, pero si esto se hace desde el gobierno sin la promoción y desarrollo de la cultura del trabajo, la solidaridad y el buen uso de los recursos, podemos convertir a los ciudadanos en vividores del estado, que al igual que la sanguijuela se pega del Estado para vivir de él,
    Los revolucionarios lo somos en el gobierno, en el partido, en las organizaciones sociales y en la sociedad toda.
    Es bueno tener claridad de que en el Gobierno y en la sociedad no todos sus integrantes son revolucionarios, en el partido de la Revolución todos deben ser revolucionarios y es importante que en las organizaciones sociales sus propuestas, programas y acciones deben ser revolucionarias.
    Estamos frente al problema de todas las revoluciones que impulsan el socialismo en el transito hacia la sociedad perfecta LA SOCIEDAD COMUNISTA.
    Luis Hernández Oliveros
    Maestro Comunero

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

MONEDERO AL ESPÍA DESDE SU ESCONDITE EN EL METRO: “SI ASUMO ALGÚN CARGO SERÁ PORQUE ME DOBLEN EL BRAZO”

GLORIA MARTIN - BANDOLEROS

ÁLVARO URIBE, EL SEÑOR DE LA GUERRA