ENTREVISTA CON EL PUERTORRIQUEÑO QUE DIRIGIÓ A CALLE 13 Y SILVIO RODRÍGUEZ

Los felices esposos, Kacho López Mari y Tristana Robles, dueños de la casa productora Filmes Zapatero, obtuvieron dos premiso Granmy Latino en la jornada en que también resultaron premiados sus paisanos Gilberto Santa Rosa, Nicky Jam y Tego Calderón.


Kacho y Tristana se abrazaron a la historia con el vídeo musical (versión corta) del sencillo “Ojos color sol” de Calle 13 y Silvio Rodríguez y con el vídeo musical (versión larga) de “Loco de amor” (La historia) de Juanes.

“Cuando hablamos de la propuesta audiovisual en la música, durante la última década, veo que se ha hecho lo mismo tantas veces, que cuando los que buscamos la distinción y explorar nuevos caminos con imágenes que la gente pueda digerir lo que queremos es alejarnos de la fórmula y trabajar la imagen desde otras inspiraciones, como la pintura y la fotografía. No me inspiro en vídeos musicales para hacer vídeos musicales, sino que me inspiro en otras vertientes del arte”, dijo Kacho a su regreso de Las Vegas.

Como parte de sus primeras declaraciones al aceptar por partida doble el Grammy Latino, Kacho clamó por un indulto para Oscar López Rivera, privado de su libertad en una prisión federal hace 34 años.

“La receptividad fue buena. El año anterior Ricky Martin se había pronunciado a favor de la liberación de Óscar, y René y Calle 13 también. No es una causa ajena al Grammy Latino. Lo que vimos fue un foro internacional, de mucha influencia, donde no podíamos quedarnos callados ante esa injusticia, aparte de que para Tristana y para mí es una de nuestras grandes causas. Es algo muy cercano a mi familia; a la ideología de mi abuelo Juan Mari Bras y en ese sentido no podía perder esa oportunidad. Desde un principio acordamos: ‘si nos ganamos esto, tenemos que decir esto en tarima”.

Kacho, cuyo trabajo en “Hecho con sabor a Puerto Rico” y “Música en tiempos” del Banco Popular de Puerto Rico, ha sido elogiado por la crítica y los expertos de la industria, ha contribuido con nuevos conceptos fílmicos a los especiales de la institución bancaria que no admiten parangón, por su originalidad, con las obras de arte del cineasta Marcos Zurinaga.

“Marcos es muy respetado por nosotros y es una especie de padre para nosotros en todo esto. Sandino Films y Zaga Films es parte de nuestra historia, que tengo muy presente. Incluso, mi padre trabajó con Zaga Films en la década de 1980 y yo recorrí los ‘sets’ de Marcos, desde niño. Respetamos mucho la historia de ese especial, y los trabajos de Gabriel Coss e Israel Lugo, directores que también aportaron su grano de arena con ‘Sonó, sonó’ sobre la vida de Tite Curet Alonso. Nosotros seguimos un poco esa línea del documental, de buscar en nuestra historia musical personajes importantes. Es una búsqueda artística y creativa que desemboca en un lenguaje único, que nos define como artistas”.

Kacho, incluso, ha incursionado en la música como guitarrista, experiencia que describe como “abrir la puerta de un mundo creativo nuevo y fascinante”.

“Ahora”, explicó, “aporta mucho a la hora de crear para estos productos musicales, aporta al ritmo y a entender lo que está pasando a nivel musical. Da mucha más profundidad para dar imágenes que son más relevantes e impulsan y levantan la música. Buscamos que el vídeo aporte a hacer la canción más grande todavía y en ese sentido más exitosa”.

Kacho, sin embargo, reconoce que su trabajo no sería lo que ha sido, es y podría ser al margen de la sapiencia y creatividad de su esposa Tristana Robles, productora de Filmes Zapatero.

“Es fundamental en todo lo que hago. Ella es la que hace realidad mis ideas. Aporta por su conocimiento y creatividad a la hora de maximizar los recursos que tenemos, que en esto son limitados porque siempre las ideas son más grandes que los presupuestos. Su trabajo es mágico. Su aportación como productora es tan importante como la mía como director”.

Mientras, el proyecto ideal de Filmes Zapatero será una película sobre la vida del patriota Juan Mari Bras, específicamente sobre lo que aconteció entre 1973 y 1979.

“Fue la época más álgida de su carrera política; fue la época en que mataron a mi tío (Santiago “Chagui” Mari Pesquera fue asesinado el 24 de marzo de 1976) y en 1973 él [su abuelo] negoció, entre los presos y el gobierno, el cierre de la cárcel de La Puntilla después de un levantamiento de manos de Carlos La Sombra y su gente que luchaban por justicia dentro del penal. Eso empieza ahí y termina en el momento en que mi abuelo es arrestado en 1979 por el FBI por desacato a la Corte Federal cuando fue a negociar la excarcelación de los presos nacionalistas en Cuba. Esa historia es compleja, pero hermosa porque habla de la lucha, de la libertad y de seguir tus sueños, principios y no claudicar ante nada. Es un mensaje del que queremos hablar y una historia que queremos contar. Es mi sueño como cineasta”, reveló Kacho, al revelar que actualmente Filmes Zapatero se enfoca en la post producción de unos documentales artísticos realizados en Barcelona mientras escribe el guión de su primer largometraje basado en el texto de un escritor chileno, del cual no pudo ofrecer mayores detalles.

Kacho López Mari y Tristana Robles seguirán colaborando con cantantes y publicistas. Su derrotero profesional, concluyó el joven director, es crear imágenes en movimiento que cautiven a la gente y contribuyan a disfrutar del arte y las cosas buenas de la vida.

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