En el momento de reconocer los resultados electorales del pasado 6 de diciembre, el Presidente Nicolás Maduro afirmó que el Gran Polo Patriótico perdió ante la guerra económica; incuestionable razonamiento, sin embargo le faltó agregar que también triunfó la guerra mediática internacional y local.
Ante estos dos factores el gobierno y su partido político no pudieron hacer frente victorioso, fue incapaz de eliminar el acaparamiento, de aminorar el desabastecimiento y el contrabando. La burguesía capitalista aplicó cada estrategia que el gobierno no supo enfrentar, a esto se le suma el ataque a nuestra moneda, el dólar paralelo y el bachaqueo. Fue una guerra aplicada con inteligente saña ante unos funcionarios incapaces y negligentes, que lugar de aminorar el problema se convirtieron en parte de él. Autoridades civiles y militares que se aprovecharon inmisericordemente del pueblo para hacer de las suyas, haciendo su propio negocio.
El descontento minó la moral del chavismo. El descontento fue el mejor aliado de la oposición. El pueblo salió a votar contra la incapacidad de los funcionarios encargados de manejar la economía local. Desde el ejecutivo se necesita una rectificación urgente del manejo de nuestra economía. Esto ya estaba advertido pero no se escuchó a la voz del pueblo.
Se perdió una batalla, esperamos recuperar y retomar nuestro camino victorioso. La oposición desde la Asamblea hará todo lo que esté a su alcance para tomar el poder ejecutivo. Debemos prepararnos para ganar las próximas batallas. No defraudemos a Chávez.
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