DESPUÉS DEL 6D, A SEMBRAR CONSCIENCIA

Resultado de imagen para A SEMBRAR CONCIENCIA en la revolucion venezolanaBUEN ARTICULO 

Escribir después de los acontecimientos, siempre ha sido una tarea odiosa debido a que es muy común decir: LO VENIAMOS DICIENDO, NO PODIAMOS ESPERAR OTRA COSA, entre otras frases que a fin de cuentas, describen la realidad más no proponen como transformarla.


Acabamos de salir de un momento político-electoral, en la campaña electoral más larga de nuestra historia reciente y cuyo resultado hay que reconocer, fue adverso, ahora bien: ¿de quien es la culpa, nos preguntamos algunos? ¡no es tiempo de buscar culpables dirán otros! ¡hay que preservar la unidad de las fuerzas, por que esta en juego la revolución! Todas estas apreciaciones, no son inocentes, expresan una postura, expresan un interés individual o grupal, pero a fin de cuentan esconden lo más importante de todo proceso revolucionario, cuando este  se asume como democrático y popular, su capacidad de ser critico y autocrítico, es decir debatir de manera fraternal entre camaradas, para identificar cuales fueron las debilidades, las fallas, los errores, las desviaciones y precisar las responsabilidades actuando siempre bajo el principio maoista: “de aplicar la medicina para curar el paciente y no matarlo”.

Debatir es un hecho inherente a la militancia política y es más entre revolucionarios es una obligación, ya que es la única herramienta que permite fundir las ideas del pueblo y sintetizar las orientaciones básicas y centrales para la lucha, es decir la construcción de la línea política (la teoría) y la acción consciente de la practica política (el trabajo) esto no es más que un método de dirección que tiene como eje fundamental la unidad social y política del pueblo, respecto con su programa de lucha (por lo que se aspira y por lo que se lucha) en este proceso dinámico y permanente las y los revolucionarios se unen en las ideas y se funden como un todo con el pueblo en la ación – lo que representa un hecho profundamente democrático.

Aquí uno de los problemas medulares de la Revolución Bolivariana, no hemos podido amalgamar la unidad de los revolucionarios en torno a una corriente que deje atrás la visión grupal y de tendencia que impide la unidad programática-popular, lo que predomina es la concepción reformista del poder. Sigue siendo una tarea pendiente, la construcción de un Partido Revolucionario este será posible cuando como revolucionarios retomemos los principios de la militancia: LA CRITICA, LA AUTOCRITICA, LA DISCIPLINA CONSCIENTE, LA PARTICIPACIÓN EN UNA ORGANIZACIÓN DE BASE Y LA MISMA OBLIGADA A PRODUCIR PARA, SOBRE LA BASE DE LOS PROCESOS FUNDAMENTALES DE LA CONSTITUCIÓN BOLIVARIANA: EDUCACIÓN Y TRABAJO FORJE EL ESPIRITU DE UNIDAD, LOS PRINCIPIOS Y VALORES DEL MILITANTE REVOLUCIONARIO. 

Comprendamos que actualmente, el mundo se encuentra dominado por la ideología dominante del capitalismo, que ante la crisis estructural que atraviesa, busca como salida avanzar hacia una fase superior superior el neoliberalismo, cuya ideología política es el fascismo, que a su vez viene ganando terreno político a nivel mundial, hoy en Venezuela los resultados electorales dan cuenta de esta apreciación.

Es menester de todas y todos, precisar que una de las fortalezas del Gigante de Sabaneta era su capacidad autocrítica, es decir su gallardía para afrontar las responsabilidades, esta derrota no puede ser huérfana, porque se convertiría en el Herodes de nuestra infante Revolución que sin duda atraviesa la más dura coyuntura, la etapa Post-Chávez  y de aquí la necesidad de retomar los hilos conductores de la dinámica coyuntural de febrero del 89 hasta octubre del 2012 y el Golpe de Timón, para retomar la senda victoriosa de la Revolución Bolivariana que implica “por ahora”: 
1.- Retomar la lucha ideológica, comprendiendo que no existe salida individual alguna ante los problemas del capitalismo y entender que en la transición al socialismo lo fundamental es construir una economía del trabajo y no una economía especulativa y rentista, donde la oligarquía asume su papel de ladrón de cuello blanco y el Estado da muestras de incapacidad para maniatar a los oligarcas y huir por la vía rápida importando todo lo que consumimos, haciendo un flaco favor a la moneda más imbécil del planeta el dolar.    
2.- Reencontrarnos con el espíritu de lucha y sacrificio antiimperialista que nos movilizaron como pueblo unido en: febrero de 1989; diciembre de 1998; abril 2002 y diciembre – febrero del 2002-2003, agosto del 2004, asumiendo que fueron nuestras raíces históricas Bolívar y todo nuestro procerato civil y militar sintetizados en el discurso, la ética y la moral política de Hugo Chávez, las que nos hicieron sentir y marchar como pueblo a paso de Libertadores, poniendo a la defensiva al Imperialismo yanqui y cambiando el mapa político de América Latina, derrotar al ALCA y desmontar el discurso neoliberal.
3.- Abrir el debate, para organizar el torrente de organizaciones que apoyan la Revolución Bolivariana en función de la unidad programática, no una agregación federativa de siglas sino integrarnos en el trabajo de constitución de la República Bolivariana de Venezuela, entiéndase nuevo Estado Comunal donde el pueblo y la clase trabajadora impulsen las transformaciones políticas, económicas, sociales y culturales comprendiendo que la democracia participativa y protagónica, no es el control de las instituciones del Estado sobre las organizaciones sociales y la administración burguesa y dadivosa de las misiones y programas sociales sino, las instituciones del Estado bajo dirección del pueblo y la administración de los programas sociales al calor de la soberanía popular.
4.- Comprender que el capitalismo, es en esencia autoritario demostrado así históricamente por los socialdemócratas, los social-cristianos y los fascistas porque tampoco es verdad que cambiaran de postura con este triunfo electoral, en contra parte debemos acelerar el proceso de constitución de espacios para el debate, en primer lugar a lo interno del PSUV, quien debe reivindicar su programa político (normas estatutarias, las líneas estratégicas de acción política y las resoluciones del Congreso) que pase a ser letra vida, sabia y fuente de inspiración de la militancia dichos postulados.
5.- Derrotar el triunfalismo, aceptado la realidad, preparándonos siempre para el peor escenario, ya que esto permitirá reorganizar estratégicamente nuestras fuerzas en función de retomar la iniciativa de sembrar consciencia en el pueblo y cosechar a mediano y largo plazo la contraofensiva popular y antiimperialista.
6.- Comenzar a pensar, cuales deben ser las iniciativas políticas para recuperar los espacios perdidos de abajo hacia arriba.
7.- Aclarar que el gran perdedor fué el reformismo que controla el poder y no Chávez, este ultimo sigue invicto, y niega toda posibilidad para el debate democrático porque quedan desnudos en el mismo, no creen en la construcción colectiva de la política y el socialismo es una frase para adornar el discurso, se ilusionaron al creer que esta campaña estaba resuelta, que el triunfo estaba asegurado y sólo erá cuestión de  exaltar la emoción chavista y no explicar pedagógicamente el programa del pueblo para vencer al enemigo y como todo el que vive de ilusión, la derrota fue el desengaño.

“La izquierda tiene el deber y la obligación histórica de avanzar conscientemente sobre la base del debate de las ideas y la cultura, ya que la derecha se organiza sobre la base de la fuerza de la costumbre”. Jean Paul Sartre.

Gaspar Camacho, 9 de diciembre del 2015

Comentarios