Bolívar se mantenía en un exclusivo sector de Barranquilla haciéndose pasar por un empresario: Dueño de autos de lujo de uso personal y de líneas de taxis, además practicante de brujería y santería
Redpres |.- Mediante la acción de las oficinas de Interpol Colombia y Venezuela, con base en labores investigativas y del efectivo intercambio de información con las autoridades policiales venezolanas se logró la captura en Barranquilla, Colombia, del venezolano Yonny Bolívar, sobre quien pesaba notificación roja de captura por el presunto delito de homicidio contra la joven Adriana Urquiola, interprete de señas del canal Venevision.
Este hombre huyó de Venezuela cruzando la frontera hacia Colombia por Paraguachón, ingresó por La Guajira y llegó de forma clandestina al departamento del Atlántico colombiano; utilizaba identidades falsas con el fin de no ser detectado por autoridades de ambos países.
Yonny Eduardo Bolívar Jiménez, de alias "Capitan Bolívar", residía en un exclusivo sector de la ciudad de Barranquilla, donde se hacía pasar como un importante empresario propietario de varios vehículos que prestaban servicio público, según informa el portal web de la Policía Colombiana.
Dentro de sus excentricidades recurría a la brujería y santería para planear sus actividades delictivas y evadir la acción de las autoridades. Al momento de la captura tenía en su poder documentos de identificación venezolano, múltiples tarjetas de crédito y se movilizaba en vehículos de alta gama y lujo.
Julliette Kure, jefa de Interpol Colombia, detalló que Bolívar Jiménez fue capturado en horas de la mañana de este jueves. Al momento de ser detenido, el sujeto se encontraba en compañía de una dama identificada como Katiuska Coello Ramírez, presuntamente su pareja sentimental y quien también quedó detenida.
Su alias de “capitán Bolívar” obedece a la usurpación de un título de la aviación con el cual se hacía pasar por piloto de la Fuerza Aérea venezolana.
Bolívar asesinó a Adriana Urquiola, que estaba embarazada, en medio de una de las protestas vividas durante los hechos violentos de calle (guarimbas) promovidos por sectores de la oposición venezolana en el año 2014. Según confesó el crimen el propio acusado a un diario venezolano, su intención no fue matar a la joven sino defenderse de un presunto ataque de manifestantes, tras lo cual desde su automóvil disparó indiscriminadamente dando muerte a Urquiola, quien lamentablemente transitaba por el lugar y no participaba en las manifestaciones. Aunque algunos testigos contradicen la versión de Bolívar, y aseguran que el sujeto llegó a bordo de una camioneta a las adyacencias de la manifestación para de inmediato efectuar disparos contra transeúntes del lugar.
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